miércoles, 15 de junio de 2011

Todo por la pasta, nada con la pasta

El dinero esclaviza, desvirtúa, engaña, corrompe, individualiza, idiotiza, artificializa,...sí, todo eso hace el dinero, sin embargo, es la salvia de nuestro leucémico sistema, y por lo tanto, por mucho que nos duela el saberlo o el tratar de conseguirlo, no tenemos más remedio que poner empeño en ello o morirnos de hambre. A pesar de todo y por fortuna, no todo resulta tan drástico y radical, y existen alternativas que pueden sofocar tan grave y abrupta realidad.

Todos sabemos que vivimos en un sistema capitalista y neoliberal, pero no todos somos adeptos al mismo ni a sus desenfrenadas pautas de consumo. De hecho, sólo unos pocos son capaces de ir en los primeros vagones de un tren que cada vez va más deprisa, sin saber que no muy lejos, se terminan las vías. Desgraciadamente, no hay opción para aquellos que no comparten sus ideales, más que acudir en masa a los últimos vagones, que, horror, se encuentran más llenos que ningún otro, a pesar de que la gran mayoría de sus ocupantes, desean abandonarlos para ocupar la primera clase. Extraño comportamiento el humano. O no tan extraño, pues el capital proporciona los medios necesarios para adquirir bienes que producen un placer inmediato en el mejor de los casos, u aplacan la necesidad en el peor de ellos. En esta dualidad enfrentada, reside la clave una y mil veces formulada por cientos de miles de seres humanos: ¿trabajar para vivir, o vivir para trabajar? Personalmente comulgo con la primera opción, pues si el dinero es sólo un medio, logicamente prefiero vivir con el mínimo necesario, pues vivir es el fin, y los verdaderos placeres de la vida apenas precisan de este.


El problema, el verdadero y preocupante problema, es que esta dualidad se enemista y enfrenta cada día más, pues el termino medio entre ambas está desapareciendo a marchas forzadas, no tanto por culpa de aquellos que prefieren trabajar para vivir, sino de aquellos que prefieren vivir para trabajar, y en su peculiar cerrazón y ceguera mental, están arrastrando a la pobreza y a la fuerza a miles de personas que no profesan sus mismos intereses, pues el sistema es competitivo, ciego y atroz, sirve a los intereses del más fuerte, y sus riendas se encuentran en las manos de este último grupo. 

No es fácil cambiar la mentalidad de las personas, más aún cuando estas llevan años siguiendo un "tren de vida" determinado, pues el ser humano es un animal costumbrista que rapidamente se aferra a su cotidiana monotonía vital. Además, el materialismo en el que algunos han caído, es una grave enfermedad que ha mellado de una forma dificilmente subsanable sus conciencias. Estas personas han adoptado un sistema de valores que basa la valía de un yo individualista en la riqueza exterior, desconociendo o ignorando el valor intrínseco de aquella real e interior. Lo grave del asunto es la mercantilización de sus vidas, pues sin ser conscientes de ello, empiezan a tratar a sus semejantes cómo si de otra mercadería se tratara. En este plano es donde la hipocresía y la frialdad hacen aparición, deteriorando y desvirtuando gravemente las relaciones humanas, que mutan a un "uso" del prójimo, siempre buscando el beneficio personal. De esta forma podemos encontrar por doquier la injusticia social, la violencia y los abusos, y ciñéndonos al propio sistema y al mundo laboral, un sinfín de empresarios que tratan a sus empleados como esclavos, exprimiéndoles hasta la saciedad por un sueldo miserable. Pero si hay algo verdaderamente triste, es que rara vez he visto felicidad en gente afectada por este mal, todo lo contrario, pues cuanto más dinero tienen, más se afanan y ciegan por conseguir más, en una carrera absurda que les va consumiendo en un mar de preocupaciones y soledad, minando su salud y empobreciendo su espíritu.

Sumido en estos pensamientos, habituales en mí, divagué antes de anoche y de madrugada por las silenciosas calles del barrio de Salamanca, acompañado únicamente por un sinfín de negras cucarachas, preguntándome cómo saldremos de este atolladero capitalista en el que nos hemos metido..o nos han metido.

12 comentarios:

  1. El empresario medio, por la cuenta que le trae e independientemente de su catadura moral, ni se planteará contratar a nadie que aspire a "trabajar para vivir".

    Desear "vivir para trabajar" se ha convertido en requisito sine qua non para acceder a un puesto de trabajo. Y tienes que demostrarlo: Si te relajas en el primer mes te vas a la puta calle.

    A veces pienso que tengo muchisima suerte de estar en paro...

    Un saludo,

    comiendodetergente.blogspot.com

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  2. La tienes amigo.yo trabajo una media de 3 días a la semana y estoy encantado...

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  3. El artículo es muy bueno, pero una pregunta... ¿¿vosotros dos de qué vivís?? ¿¿del aire?? estoy seguro que residís en casa de vuestros padres y claro, así es muy fácil hablar... ya me gustaría a mí trabajar 3 días a la semana... pero a día de hoy eso es imposible si se quiere ser independiente...

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  4. pues si, ambos vivimos en casa de nuestros padres, pero al menos en mi caso no tengo demasiadas pretensiones económicas ni ansío hipotecarme o pagar desorbitadas sumas por una vivienda, ya sea en alquiler o en cadena de esclava hipoteca.De todas maneras se puede ser independiente y trabajar para vivir, aunque es realmente dificil.Quiza por eso no tengo esa independencia, porque amo demasiado otra serie de independencia, la mental. De todas maneras resulta muy triste que tengas que matarte a currar y no tener apenas tiempo para vivir tu vida si realmente deseas vivir "independizado".Quizá por eso, porque me parece inmoral y destructivo, no se me ocurre irme de casa, y si me voy lo haría en piso compartido.Pero todo esto es muy relativo, cada persona y cada situación son un mundo, y todo cambia y cambiará, para todos.Te respondo a la pregunta diciendote que cualquiera puede opinar sobre esto, incluidos dos "mantenidos", como nosotros, y sin ningún tipo de pudor o verguenza.saludos

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  5. De todas maneras este artículo versa sobre la avaricia y el desconocimiento espiritual de algunos y sobre la inmoralidad de nuestro suicida sistema capitalista. Creo que te has desviado un poco del asunto.

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  6. No sé la edad que tienes pero creo que cuando cumplas unos años más lo lógico y normal es que quieras/necesites independencia para poder formar tu propia familia y lo de irte de casa de tus padres no lo verás tan inmoral, no creo que con 40 años quieras seguir estando en tu situación actual... Por suerte tengo un buen trabajo y "trabajo para vivir", los esfuerzos extra que realizo en el curro son porque quiero y me merecen la pena porque gracias a esa "avaricia" puedo permitirme pequeños caprichos que disfruto mucho con mi mujer y mi familia. Creo que todos los curritos de a pie tenemos claras nuestras prioridades y no compartimos este sistema capitalista, pero chico, hay que comer todos los días y si el plato de comida no te lo da nadie, pues hay que pagarlo y para hacerlo hay que ganar dinero trabajando. Lo de la avaricia, el desconocimiento espiritual y demás dejalo para los Botín, Bill Gates, etc, etc... el resto simplemente tratamos de sobrevivir y no por ello creemos que sea ni inmoral ni destructivo. Espero que la vida te sonria y puedas seguir pensando así porque si no se te va a hacer muy cuesta arriba el mundo real. Saludos.

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  7. Anónimo, un matiz: Yo ni resido en casa de mis padres ni en la mía propia. Me parece tan digno vivir con tu familia como pagar una vivienda, pero abre tu mente a más opciones a parte de "mantenido o endeudado".

    Solo quiero recordarte que esta mentalidad de "uno debe tener su propia casa antes de los 25 o si no la gente le atacará por ello en los comentarios de un blog" es la que ha llevado recientemente a tantos jóvenes inconscientes a endeudarse y arruinar sus vidas cuando las condiciones no eran las optimas para tomar semejante decisión.

    Si hay alguien con capacidad de criticar lo diabólico e insostenible de este sistema económico, ese alguien es quien aún no está encadenado por el mismo: Este es el caso de Lobo y de quien escribe.

    Como ya te han dicho más arriba, da la impresión de que no has entendido un articulo tan claro y bien redactado como el que tratamos. Si no fuese así, los aires de superioridad que se desprenden de tus lineas no tendrían justificación alguna. Se trata precisamente de criticar que sea casi siempre necesario renunciar a una vida digna si se quiere ser independiente en esta sociedad (osea, que todos nos alegramos mucho de que seas tan feliz y tengas un trabajo tan estupendo, pero por desgracia la inmensa mayoría las pasa canutas par comer a diario).

    Respondiendo a tu pregunta, y concluyo con este tocho, obviamente no "vivimos del aire". En mi caso, realizo trabajos puntuales además de recibir ayuda familiar. Si no fuese así ya me habrías visto en las noticias atracando gasolineras, esa es la tragedia.

    Un saludo (y perdona la extensión del comentario, Lobo).

    comiendodetergente.blogspot.com

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  8. Que había que publicarlo... estoy de acuerdo contigo!!!, pero no con frases del autor como "Quizá por eso, porque me parece inmoral y destructivo, no se me ocurre irme de casa" no porque alguien decida irse de casa es una persona inmoral, ¿qué tiene de destructivo?, muy al contrario, hay que salir del nido para ver lo que realmente hay por ahí... repito que es muy fácil hablar cuando se tiene la suerte de tener un apoyo económico de la familia, lo jodido es lo otro...

    Yo también puedo hablar con toda la libertad del mundo porque gracias a Dios y a que me lo he currado mucho desde que acabé la carrera tengo la hipoteca casi pagada y no estoy "encadenado al sistema", compré el piso antes del Boom inmobiliario, en estos tiempos ni se me hubiera pasado por la imaginación porque sería un suicidio, en eso estoy de acuerdo contigo.

    Y sí, el artículo es muy bueno, eso no lo discuto, es sólo mi opinión.. Saludos.

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  9. No,no,inmoral es tener que pagar más de la mitad de tú sueldo en una vivienda,cuando esta es un derecho fundamental..no el irse fuera.en tu caso tuviste suerte y te independizaste antes de la crisis.saludos

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  10. Desde el momento en que hipotecas tú vida por 4 ladrillos estas atado.el problema ha sido la especulación,y esa nace precisamente de esa avaricia.al final pagan justos por pecadores.a eso me referia..por otra parte me parece elogiable dar el paso con los tiempos que corren,anónimo!

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  11. Resumiendo,que no estoy dispuesto a pagar tan elevado precio por independizarme.a fin de cuentas,en mi casa no represento ninguna carga económica significativa,y formar una familia con la que está cayendo y la crisis de valores que hay,es poco mas o menos que una misión imposible. Por otra parte,el propio sistema se encarga de atacar y destruir constantemente tan noble y venerada institución..no os parece?

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  12. Totalmente de acuerdo, la persona de a pie (léase currito) gana entre 1000/1500€ (y a dia de hoy con suerte) esclavizado a un horario, unas normas, unas disciplinas ferreas, no poder contestar un mensaje al movil etc..... casi casi esclavizatorias de antaño.. no concibo como puede pagar una hipoteca que cuesta 700/o 1000 en algunos casos como he visto, trabajaba en promotoras inmobiliarias y he visto cosas en le que la palabra avaricia o codicia se quedan cortos, compra una casa para cuanto antes tengas la de la playa asi asi...el sistema te come cuando la mayor casa que todo stenemos y la mas bella (Y GRATUITA) es nuestra propia naturaleza e importa un pepino destruirla, yo lo tengo claro, a los bancos ni agua...

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